domingo, 8 de marzo de 2009

Me pierdo salmón (*)

Con tanto dolor no puedo
contigo o sin ti no puedo.

Es noche y sin ti no quiero
no quiero un te quiero
pero cuánto te quiero

Con tanto colchón me pierdo
conozco el camino,
pero me pierdo

Es día y sin ti no quiero
no quisiera quererte
pero cuánto te quiero

Es muy duro saber
cuál es la mejor mujer
es muy duro saber

Con tantas horas al día
me entierro
te quiero volando conmigo
me entierro

Es tarde y sin ti no quiero
no quisiera quererte
pero cuánto te quiero

No sé ni la hora, te espero
es mediodía y sin ti no quiero
no quiero olvidarte pero pasa el tiempo
no quisiera quererte
pero cuánto te quiero

el tiempo pasa
nos vamos poniendo menos
es muy duro reconocer cual es la mejor mujer
es muy duro saber
con tanto dolor no puedo
contigo o sin ti no quiero

Es noche y sin ti no puedo
no quisiera quererte pero te quiero.

(*) ME PIERDO SALMON es exactamente igual a ME PIERDO, escrita por Andrés Calamaro, ese poeta urbano argentino con el cual muchas veces hay tal grado de empatìa, asi como similitud de sentimientos y tormentos, a tal punto que en dos instantes diferentes en el mundo de dos poetas diferentes puede llevarse a cabo la creación sentimental de dos poemas diferentes, basados en dolores con nombre de mujeres distintas, pero con las mismas palabras, con los mismos dolores, con las mismas necesidades de derramar el ser en un papel, para poder seguir adelante....como diría él, el salmón (apodo de Andrès), "con aguante", como dirìa yo, el cuervo, "con entereza y dignidad", pero sin perder la oportunidad, ninguno de los poetas, de escribir un buen o hermoso poema o canción, como dice la gente... No es hermoso. No es ninguna cualidad para escribir. No es un homenaje al amor ni al desamor. No es que uno sepa escribir ni que tenga un don para eso como dicen los amigos. Se trata tan solo de la verdad más sincera, de la sinceridad más verdadera; de lo más descarnizado y sincero que puede decir el corazón, de lo único que puede decir el corazón, cuando es sincero: la verdad, aunque esta sea una tragedia personal... y sale un poema...
En fin. Es asi que uno lee un poema en el mundo... escrito por otro poeta... y siente... ese es mi poema... pero no lo es... pero si lo es. Uno no lo escribío, pero lo vivió, y si se hubiera apurado un poco más, hubiera escrito el mismo poema, exactamente igual. El dolor es amigo de la poesía. La pena es hermana de los versos. La melancolía es un modo de denominar a algunas naturalezas humanas, a algunas almas atormentadas de aquellos poetas que escriben sobre el amor, sobre los trastos o sobre el Sol con la misma pasión. No hay nada mejor.

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